4.02.2006

¡Pum! ¡Para arriba!

COSAS DE BOCA
2-1 en La Boca a Banfield, con mucho huevo. ¡Pum!: el disparo de Ibarra. ¡Para arriba!: compartimos la punta con Newell's y las hijas aves.
Hay cosas que Boca solamente puede lograr, y la tarde de hoy se vistió de eso, de Boca. Cuando la gente de un equipo otro cualquiera le pide algo a sus jugadores, piensa en que ese algo (huevos) lleguen a conseguir objetivos limitados. Boca, por su lado, rompiendo esa costumbre, es todo al revés: la gente banca siempre y siempre a pesar de que las cosas en el campo no estén bien, y de adentro se reciben respuestas que superan todo lo que uno puede llegar a imaginar.
Dejando para más adelante el tema huevos, volvamos al tema de siempre: el arbitraje. Cuando se decía Rosario y Baldassi, un dolor de cabeza no es raro, ya que lo que pasó el miércoles no tiene nombre. Hoy, Favale, otro apestoso árbitro, fue definitivo a la hora de decidir: en la jugada previa al penal de Banfield, no cobró posición adelantada de Romero y, luego, no cobró un penalazo a Insua, a quien, encima, le sacó amarilla y consecuente roja. Por estos dos hechos lamentables Boca jugó condicionado gran parte del segundo tiempo, con Daniel Díaz y Federico Insua fuera de la cancha.
Previamente, el Xeneize había demostrado toltamente la superioridad y el merecimiento en el resultado, más allá de todo error del arbitraje. Llegadas por parte de Insúa, Ledesma, Gago, Palacio y Palermo eran escenas de un primer tiempo que debía terminar en goleada, pero no fue así. Y mire cómo no liga Boca: en una llegada post-centro de tiro libre, de cinco tiros al arco ninguno tuvo el destino tan justo que era el gol. Y esto solo recién llegó luego de un disparo de Martín Palermo y rebote en la defensa de Banfield.