Un Loco lejano

INDEPENDIENTE 1-3 BOCA JUNIORS

Locura Xeneize en la noche de Avellaneda. Con locuras, fue así como ganó Boca. Martín Palermo selló una victoria manchada por un planteo defensivo en el segundo tiempo, pero no deja de ser muy disfrutada debido a varios factores. Riquelme fue fundamental en los dos primeros goles. Neri Cardozo volvió a ser la pieza más importante. Y al final, Martín, volvió a ser leyenda. Y por eso, aplaudan aplaudan...

El pasado de Boca está siendo representado físicamente con Riquelme. Todas las miradas están sobre él, todos hablan de él y en todos lados está escrito su nombre. Hoy tuvo un primer tiempo brillante, asistiendo con dos bochas geniales a Cardozo y Palacio para los primeros goles, sumando una más que no supo definir este último (como siempre). Román fue fútbol en cuerpo y calidad en alma, y va llegando de a poco a lo que todos los hinchas de Boca queremos que llegue: el Riquelme de años atrás.

Pero más allá de todo Romy que haya, la noche de Avellaneda cerró con una alegría que me animo a decir indescriptible. Claro, ese Martín Palermo cuestionado, que tuvo mucha mala fortuna en dos jugadas que pudieron haber liquidado el partido antes de lo que se liquidó y también un jugador muy negado, se llevó todas las miradas de la 3º fecha. El gol del campeonato, del año, como quieras nene, pero hoy Palermo, desde 50 metros, nos hizo gritar el 3º y definitivo, ante un Ustari adelantado.

La victoria fue muy justa. Boca sufrió la expulsión de jugador tan fundamental como lo es Banega, quien estaba siendo una pieza clave en el mediocampo. Claro, la primera amarilla la recibió luego de que Boca perdiera la pelota por un rebote en el árbitro, detalle que seguramente pocos periodistas aclararán (tanto que nos favorecen a nosotros).

Por otro lado, para destacar, por favor despierten a Battaglia y a Morel. Avisenle a Ibarra que los marcadores de punta también marcan y, si pueden, a Díaz que en los centros vale saltar.

Pero bueno, son detalles que se pueden salvar. Lo que nadie va a salvar es la vuelta de Martín al gol.